domingo, 8 de junio de 2008

La rebelión Cambá

La rebelión camba

Dicen ser “los blancos” del país y odian a “los indios del altiplano”. Pertenecen a la región más rica y rechazan a Evo Morales.

Al hablar de Bolivia, muchas veces, los medios se refieren al “país del altiplano”, y reproducen un estereotipo. Solo un tercio del país está en los Andes, el resto son llanuras y selvas. Hay forestas amazónicas, ríos anchos y caudalosos, y un extenso Chaco, que para nada es semejante al argentino.
Hace casi un mes, el principal departamento de la “nación Camba”, Santa Cruz de la Sierra (el más rico del país), votó un referéndum autonómico, que no tenía la autorización del gobierno central de La Paz. Inclusive ni la intervención de la OEA (Organización de Estados Americanos) –que tenia la intención que dialoguen y así evitar actos de violencia- pudo frenar la convocatoria de la “consulta popular”- El 85% votó que sí en un referéndum un estatuto económico (en que solamente votó la mitad de habitantes de todo el departamento), inspirado en el de Cataluña, y le otorga a Santa Cruz una independencia, similar al menos, a la que gozan los catalanes. Lo cual le permite una autonomía y les abre las posibilidades de ir a negociar y defender sus latifundios y riquezas ante el gobierno Central.
Era lo mas esperable, porque cuando en un país complejo hay desigualdad económica entre las regiones, el impulso separatista de los más ricos es una consecuencia política que resulta esperable. Voluntad de unilateralismo no les falta a las autoridades, al Comité Cívico local ni a los hacendados cruceños que temen la aplicación de una reforma agraria desde La Paz. Aún Estados Unidos, acusado por Evo Morales y Hugo Chavez de incentivar la animosidad cruceña, habló a favor de la unidad. Washington querría un país bajo el mando de los cruceños, pero no una secesión dee las regiones ricas.
En la actualidad, los recursos de la gran minería boliviana vienen en descenso, y las regiones ganaderas y agrícolas de Oriente, son las más ricas del país. Ellos: se llaman “cambas” -por oposición a los “collas”; odian a los “indios”; dicen que ellos sí son “gente”, católicos y “no paganos”. Son descendientes de españoles –sobre todo de andaluces-, de croatas, de alemanes. Se sienten “blancos”, dicen que hablan inglés y sostienen que son los que proporcionan reinas en los concursos de belleza.
Además, se sienten más cercas de los argentinos y brasileños, y aún de los paraguayos, que de los bolivianos de estirpe andina, “collas”, que hablan Quechua y Aymara, y son los pueblos originarios.
Para los argentinos, que comúnmente solemos denominar a los bolivianos como “bolitas”, es muy difícil representarnos quienes son los cambas, ya que no hay una emigración mayoritaria en la Argentina. Ellos comen asado, no les gustan los picantes, viven en regiones cálidas, con agricultura y ganadería poco diferentes a las de Río Grande Do Sul.
Sólo que deben su prosperidad, sus agroindustrias al Estado Nacional en una medida mayor de la que gustan en reconocer. Por ej. La soja cruceña, no es competitiva como la de Brasil o Argentina, pero está subsidiada por Colombia, pues Bolivia integra la Comunidad Andina de Naciones (CAN), fuera de este bloque les sería difícil encontrar a quién venderla a los precios que lo están haciendo.
Bolivia es un país unitario, algo difícil de entender para nosotros argentinos-brasileros tan federales y federalistas. Por ello el costado legítimo del reclamos local es el pedido por mayor descentralización. El menos legítimo, es que no quieren que sus recursos se drenen al desarrollo y progreso de otros departamentos más pobres. Por sobre todo, no quieren que el gobierno central sea el que le aplique la reforma agraria. Ya que muchos de los títulos de propiedad de tierras en Santa Cruz fueron otorgados, cuando se estableció la dictadura nacional de Hugo Banzer Suarez, un cruceño, que repartió tierras fiscales a amigos y aliados. Las clases medias que no tienen tierras, temen el cambio del paisaje social: con el nuevo reparto de las tierras (mediante la reforma agraria) y la distribución de las riquezas los habitantes del altiplano descenderían a cultivar las llanuras. Las dejarían convertidas en un productivo jardín, pero esto es algo que las falanges cruceñas no parecen bien dispuestas a tolerar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bastante bien pintada la realidad boliviana..... por suerte, los "cambas" son una minoria incluso en su propio dpto de Santa Cruz... agreguenle a eso que los cruceños no-separatistas o bien no tienen dni o bien no les interesa votar ni participar como ciudadanos... ya en 500 y pico de años han aprendido sobradamente que para ellos da lo mismo republica, colonia o virreynato.. saludos!